Facultad Tecnológica

Emprendimiento optimiza la eficiencia de los paneles solares

El equipo de trabajo se adjudicó un fondo de Valorización de la Investigación en la Universidad (VIU) por 24 millones de pesos para crear en un sistema automatizado de limpieza para paneles fotovoltaicos o solares. En sus primeras etapas, esta innovación logró mejorar los niveles de productividad, manteniéndola en su máxima capacidad. “El problema está en que estos paneles pierden cierta cantidad de potencia eléctrica por el tema de la suciedad. Con esta solución, vamos a aumentar la eficiencia del panel, en términos de rendimiento y energía producida”, explica Leandro Ampuero, tecnólogo en telecomunicaciones e ingeniero en ejecución en electricidad, quien lidera la iniciativa.
“Estamos intentando también transmitir estos conocimientos a los estudiantes, cambiar el paradigma tradicional, incentivar el deseo por el emprendimiento y acercarlos a estos temas que son relevantes para ellos, tanto desde un punto de vista del mercado laboral, como profesional”.

Leandro Ampuero, Tecnólogo en Telecomunicaciones e Ingeniero en Ejecución en Electricidad de la Universidad de Santiago, se adjudicó fondo de Valorización de la Investigación en la Universidad (VIU) para trabajar en prototipo de sistema automatizado de limpieza para paneles fotovoltaicos.

El proyecto busca mantener la eficiencia del panel a su máxima producción. Como explica Leandro “el problema está en que estos paneles pierden cierta cantidad de potencia eléctrica por el tema de la suciedad. Con este proyecto nosotros pretendemos aumentar la eficiencia del panel, en términos de rendimiento y energía producida”.

El equipo de trabajo está compuesto por dos ex estudiantes de la Facultad Tecnológica, Leandro Ampuero, Tecnólogo en Telecomunicaciones e Ingeniero en Ejecución en Electricidad e Ignacio Díaz, Tecnólogo en Telecomunicaciones; Bárbara Marambio, Analista Químico Físico; y Luis Rivera, Jefe de carrera de Tecnología en Telecomunicaciones de la Facultad Tecnológica.

El fondo adjudicado por el equipo liderado por Ampuero corresponde a la segunda etapa del proceso de Valorización de la Investigación en la Universidad (VIU), donde se hace entrega de 24 millones de pesos para crear el prototipo del producto que se postuló. Como señala Leandro, “lo que espera Conicyt es que uno pueda tener el prototipo del producto, se demuestre que es factible para el mercado, y de ahí poder armar una empresa”.

El concurso busca fomentar una cultura de emprendimiento innovador en la comunidad universitaria, en base a la valorización de la investigación dentro de las universidades chilenas, por egresados de pre y postgrado, que basados en investigaciones, tesis, memorias o proyectos de investigación, quieran, en conjunto a profesores guías o investigadores asociados, materializar su emprendimiento.

Cabe destacar que sólo postularon cuatro equipos de la universidad, donde finalmente sólo dos se adjudicaron la segunda etapa del concurso, siendo uno de estos el equipo de la Facultad Tecnológica.

 

La senda del estudio

 

Pero el interés por la investigación, el emprendimiento y la innovación no es sino el resultado de una larga trayectoria educativa por parte de Leandro, donde desde sus tiempos como estudiante de Tecnólogo en Telecomunicaciones vio el surgimiento de su dedicación al emprendimiento como una oportunidad para explotar y desarrollar sus capacidades.

Su interés por el estudio y capacitación lo llevaron a tener al día de hoy dos carreras cursadas, un diplomado en gestión y administración de redes de datos, impartir clases como profesor hora, y estar estudiando actualmente un magíster en gestión de la innovación y el emprendimiento tecnológico.

Luis Rivera, Jefe de carrera de Tecnólogo en Telecomunicaciones, miembro y profesor guía del equipo, señala que esta senda que Ampuero ha ido construyendo con el tiempo, lo ha llevado a hacer clases e intentar motivar a otros estudiantes que comparten la misma inquietud por el emprendimiento y la innovación.

Sin embargo, no es sólo Leandro quien ha cultivado el emprendimiento. Ignacio Díaz, Tecnólogo en Telecomunicaciones y actual estudiante de Ingeniería en Ejecución en Electricidad, también ha desarrollado una senda similar, impartiendo clases como profesor hora de la carrera y adjudicándose la primera etapa de un VIU, de forma independiente, con un proyecto de prototipo de socket inalámbrico para el control y monitoreo inteligente de la iluminación en el hogar.

Leandro señala que el apoyo por parte del académico, Luis Rivera, ha sido clave en su paso por la universidad y el desarrollo del proyecto. “Con el profesor Luis, desde que yo estudiaba Tecnólogo en Telecomunicaciones, hemos venido desarrollando diferentes proyectos, partiendo por unos más pequeños, hasta lo que estamos hoy”.

De igual forma, comenta que desde un comienzo pusieron énfasis en la temática de las Energías Renovables No Convencionales. “Mientras cursaba mi carrera de tecnólogo, obtuvimos un proyecto de opinión pública, donde mostrábamos que se podían hacer cosas con el tema fotovoltaico, adelantando que esto es lo que se viene. También postulamos con un proyecto que se llamaba “Promoviendo las energías renovables no convencionales en el mundo escolar y en la sociedad”, que buscaba acercar el tema fotovoltaico a los colegios de enseñanza media”.

 

Incentivando la innovación

 

Este deseo por la innovación y el emprendimiento es lo que está buscando promover la carrera de Tecnología en Telecomunicaciones, acercar a los estudiantes a los distintos concursos para acceder a fondos y poder levantar un emprendimiento. Luis Rivera es enfático en señalar que este es uno de los objetivos más importantes de la carrera: “Como jefe de carrera estoy  intentando incentivar a algunos estudiantes a que postulen a estos proyectos. Nuestro objetivo como carrera es que, ojalá, todos los años un estudiante esté postulando a estos proyectos”.

Y agrega: “Estamos intentando también transmitir estos conocimientos a los estudiantes, cambiar el paradigma tradicional, incentivar el deseo por el emprendimiento y acercarlos a estos temas que son relevantes para ellos, tanto desde un punto de vista del mercado laboral, como profesional”.

Este interés por las energías renovables no convencionales y las nuevas tecnologías se ha visto reflejado en la incorporación de la robótica y la domótica como temas claves en la malla, acercándola más a las nuevas exigencias del sector productivo: “Estamos incluyendo las energías renovables no convencionales, la robótica y domótica a nuestra malla. Estamos intentando crear algo interesante, entregándoles a nuestros estudiantes un conocimiento más avanzado de estos temas que a ellos les interesan”.

Respecto a la situación  nacional del uso de paneles fotovoltaicos, Ampuero menciona que las plantas fotovoltaicas han tenido un crecimiento exponencial dentro de las energías renovables no convencionales. En tanto que a nivel residencial no es una realidad aún en Chile, debido a la inversión inicial que se necesita hacer, que se recupera en un promedio de siete años plazo.

Actualmente, el equipo se encuentra realizando, en conjunto a la DGT (Dirección de Gestión Tecnológica) un prototipo en proceso de patentamiento.

Autor: 
Estefanía Ibaceta González