Revolución húngara de 1956

Plantel se suma a conmemoración

La ceremonia organizada por el Instituto de Estudios Avanzados (IDEA), contó con la participación de representantes del país centroeuropeo, así como de autoridades, académicos y estudiantes de nuestra Casa de Estudios. Junto con resaltar el convenio de colaboración con la Universidad de Pécs, la Rectora subrogante, Dra. Fernanda Kri Amar, valoró que en los años 90 “la memoria fue restituida y, en una tarea similar a la chilena, se proveyó de sustento a la revisión del pasado, a la construcción del futuro y a la vivencia intensa de las libertades en el presente”.
“Hungría ha probado ser un país resiliente, en el sentido que su historia muchas veces lo ha hundido y sin embargo ha vuelto a resurgir”, Dr. Cristián Garay Vera

Con una mesa de análisis y la inauguración de una exposición fotográfica, nuestra Universidad se sumó a la conmemoración del Día de la República de Hungría, que recuerda tanto la Revolución de 1956, que se extendió entre el 23 de octubre y el 10 de noviembre en contra de las políticas impuestas desde la Unión Soviética, así como el establecimiento de la República de Hungría en 1989.


En la ceremonia, realizada en el Salón de Honor, participaron representantes de la embajada de Hungría en Chile, de la Cámara de Comercio Chileno-Húngara, de la comunidad húngara en el país, además de autoridades, académicos y estudiantes de este Plantel.


Restitución de la memoria y vivencia de las libertades


En su calidad de Rectora subrogante de la Universidad de Santiago, la Dra. Fernanda Kri Amar destaca que “Hungría es un país como el nuestro, pequeño en magnitud demográfica, pero dueño de una sorprendente visibilidad en la Historia a través de sus músicos y matemáticos, a los que algunas infografías del patio central de nuestra Universidad rinden tributo”.


Además, resalta el flujo de intercambios entre este Plantel y la Universidad de Pécs, a propósito del convenio de cooperación que se ha traducido en la visita a Chile de sus autoridades, así como en eventos que han congregado en Hungría a académicos de esta Casa de Estudios Superiores.


Incluso, respecto de los hechos de 1956, plantea que aunque fue un hecho militarmente fallido, sin embargo fue políticamente fecundo. “Gracias a ello, en los años 90 Hungría recuperó su identidad de país centroeuropeo. La memoria fue restituida y, en una tarea similar a la chilena, se proveyó de sustento a la revisión del pasado, a la construcción del futuro y a la vivencia intensa de las libertades en el presente”, manifiesta la Dra. Fernanda Kri.


Una victoria de dos semanas, que finalmente fue un sueño


Junto con agradecer a la Universidad de Santiago y los años de cooperación y relaciones bilaterales, especialmente a nivel de universidades, el ministro y encargado de negocios de la Embajada de Hungría en Chile, Csaba Pólyi, destaca el trabajo de los académicos Dr. Fernando Estenssoro Saavedra, director del Instituto de Estudios Avanzados (IDEA), y del Dr. Cristián Garay Vera, integrante de la misma institución, por dar la oportunidad de conmemorar el 60° aniversario de la Revolución de 1956.


“Se trata de una Revolución fallida que obligó a casi 200 mil personas a dejar Hungría en aquella época. Por eso estamos muy agradecidos de todos los países, entre ellos Chile, que acogieron a nuestros compatriotas y les brindaron una segunda oportunidad de restablecer sus vidas y vivir libremente”, recuerda el diplomático.


Asimismo, detalla que “prácticamente fue una protesta de los jóvenes estudiantes, a quienes se sumaron después los jóvenes obreros, dueñas de casa, gente de la calle, que comenzaron a exigir la retirada de las tropas soviéticas desde Hungría. Se logró una victoria de dos semanas, porque las tropas efectivamente se retiraron. El nuevo primer ministro declaró la independencia, pero todo fue un sueño, porque vivíamos en un mundo bipolar”.


En ese sentido asegura que desde el cambio del sistema político y económico ocurrido en 1990, este aniversario se ha convertido en una fiesta nacional que refuerza el sentido de los húngaros por los valores de la libertad, la independencia y la soberanía.


Un país resiliente con ideales y convicciones


Como organizadores del encuentro, desde el Instituto de Estudios Avanzados de nuestra Universidad (IDEA), el académico Dr. Cristián Garay Vera, destaca las relaciones entre la Universidad de Santiago y los académicos húngaros. “Bien sabido es que a raíz de las dificultades lingüísticas de su idioma, han desarrollado un talento muy sobresaliente en las áreas de la física, la matemática y la ciencia”, explica.


“Hungría ha probado ser un país resiliente, en el sentido que su historia muchas veces lo ha hundido y sin embargo ha vuelto a resurgir”, agrega el académico, advirtiendo que “si las personas fueron capaces de salir a la calle y exponer sus vidas, porque el escudo no representaba el valor y la continuidad de la identidad húngara, es porque no sólo se trataba de un problema de distribución. También existían ideales y convicciones”.


Por ello, el Dr. Garay no duda en plantear que “la espuma noticiosa sería que el 23 de octubre se inició una rebelión que falló. Pero la identidad profunda, el fárrago, eso que va detrás, sería que un día volvió a ser Hungría y mantuvo la determinación. Y sin violencia ni sangre retornó a la democracia en 1989”.

Autor: 
Fernando Seymour Dobud