El pasado martes 2 de diciembre el Vicerrector de Finanzas y Logística, Dr. Pablo Méndez Montenegro, dictó una charla dirigida a personas de los estamentos académico y funcionario sobre las 4 principales legislaciones en materia de incentivo al retiro, un derecho de las y los trabajadores de la Administración del Estado (o sus antecesores legales) que se encuentran ad portas de jubilar y cuentan con una carrera funcionaria de 10 años o más en calidad de “a contrata”.
El Incentivo al Retiro consiste en una bonificación adicional y otros beneficios que buscan mejorar las condiciones económicas al momento de jubilar. Al actual período de postulación, que termina el 10 de enero de 2026, pueden postular mujeres entre 60 y 65 años, hombres de 65 años, mientras que el próximo proceso considerará los mismos rangos etarios y sumará al funcionariado mayor de 65 años al 31 de diciembre de 2025 que cumpla con los requisitos.
El beneficio compensatorio lo paga directamente la Universidad a través de la cuenta corriente de cada persona (no a través de su AFP), mientras que la bonificación adicional se paga en UF (al valor del momento de la renuncia) y depende del estamento de la funcionaria o el funcionario.
En la charla se revisaron las 4 leyes vigentes de Incentivo al Retiro de funcionarias/os públicos: la Ley 20.374 de Bonificación Compensatoria, la Ley 20.305 (sobre el Bono Post Laboral) y las leyes 20.996 y 21.043.
Una instancia de aclaración de dudas
Cabe destacar que esta charla fue una de las dos que se dictarán en el contexto de Incentivo al Retiro: en esta oportunidad, el enfoque fue entregar información clara y concisa a aquellas personas interesadas en postular a este beneficio. A mediados de 2026, por otra parte, se realizará un nuevo espacio en el cual se guiará a quienes les sean asignados los cupos de Incentivo al Retiro, según la resolución del Ministerio de Educación. Estos cupos son limitados debido a que se distribuyen entre las 18 universidades estatales.
El objetivo del segundo espacio al que se convocará es guiar a las personas interesadas respecto de si les conviene seguir trabajando, o si es más favorable que acepten el cupo y renuncien a la Universidad. Esto debido a que, las personas que se acojan al Retiro, no pueden volver a ser contratadas por algún organismo del Estado (a menos que sea bajo la figura “ad honorem”). Por este motivo, el Vicerrector de Finanzas y Logísticas es enfático aclarando que “retirarse no es lo mismo que jubilar”.
“Planeo postular ahora, de todas maneras, porque en una semana cumplo 65 años”, comenta Anakena Ibaceta Díaz, asistente a la charla y profesora por hora del Departamento de Matemáticas y Ciencias de la Computación. “La charla no solamente resolvió mis dudas, sino que también nos dieron muchos consejos prácticos. Yo venía pensando ‘postulo o no postulo’, pero con esta información, me decidí 100% a postular”, agrega.
Es importante destacar que quienes postulan al beneficio pueden no ser seleccionados, sin embargo, en estos casos se mantienen como opciones preferentes para los años venideros. Por este motivo, el Dr. Méndez invita a la comunidad interesada a que “postule a la brevedad. En caso de que les pase algo, la bonificación adicional es transmisible por causa de muerte, y, por lo tanto, si no postulan y les pasa algo, la familia no podría acceder a esa bonificación adicional como herencia”.
Además, a nivel de institución se creó la Oficina de Retiro, la cual cuenta con personal capacitado para recibir cualquier consulta sobre este tema. Quienes quieran consultar por su situación particular, pueden escribir al mail oficinaderetiros@usach.cl o bien a alejandra.jerez.r@usach.cl.