Este lunes debutó en Santiago:

Expertos Usach aseguran que Sistema de Admisión Escolar del Gobierno de Bachelet es el mejor que ha tenido Chile

Los académicos de la Universidad de Santiago, Dr. Jaime Retamal y Dr. Mario Sobarzo, destacaron que la plataforma entregará a los apoderados la facultad de decidir a qué colegio ingresarán sus pupilos. Aunque reconocen que es perfectible, enfatizan que el principal beneficio del SAE es que quitará a las escuelas que reciben fondos del Estado la facultad de escoger a quiénes educan en sus aulas.
“El sistema es lejos mucho mejor de lo que hemos tenido hasta ahora porque quita el elemento discrecional de las escuelas, que eran las que definían a los estudiantes que querían tener en sus aulas".

Este lunes debutó el Sistema de Admisión Escolar (SAE) en la Región Metropolitana, la última del país en sumarse a la plataforma. El mecanismo, que elimina el uso de las notas como factor de selección, busca que los apoderados elijan los colegios donde  quieren que sus hijos sean educados. El sistema asigna cupos, según las vacantes disponibles, en aquellos establecimientos que priorizaron los padres en su postulación.

Para los expertos en educación y académicos de la Universidad de Santiago, Dr. Jaime Retamal y Dr. Mario Sobarzo, no hay dudas: el SAE es el mejor sistema de postulación de colegios que ha tenido el país a la fecha, señalan. Si bien ambos reconocen que es perfectible, destacan que se otorgue relevancia al interés de los padres y no se deje solo al arbitrio de las escuelas la decisión de quienes se educan en sus aulas.

“Este es el mejor sistema que hemos tenido en el país. Vino a reemplazar el uso indiscriminado de criterios relacionados con el lucro y otros aspectos subjetivos, como el estado civil de los padres. Se instala la justicia educacional en el ámbito de la selección y se superan aquellas prácticas en colegios que reciben aportes del Estado”, resaltó Retamal, Doctor en Ciencias de la Educación, académico del Departamento de Educación de la Usach e investigador de la política pública educacional a nivel nacional.

Opinión similar tiene Sobarzo. “El sistema es lejos mucho mejor de lo que hemos tenido hasta ahora porque quita el elemento discrecional de las escuelas, que eran las que definían a los estudiantes que querían tener en sus aulas… Con el nuevo sistema, son los padres los que deciden, porque son ellos los que hacen una priorización según cuáles son más cercanas a lo que ellos esperan para sus hijos”, resalta el investigador en Filosofía de la Educación, Doctor en Filosofía Moral y Política y académico del Departamento de Filosofía de la Casa de Estudios.

Los apoderados deben ingresar a www.sistemadeadmisionescolar.cl y registrarse. Luego, podrán escoger los establecimientos municipales y particulares subvencionados a los que desean enviar a sus hijos indicando un orden de preferencia. Cuando un colegio tenga más postulantes que cupos disponibles, se activará un algoritmo que sorteará esas vacantes, sin importar el rendimiento académico del postulante.

“En la Región de Magallanes, los apoderados registraron hasta un 60% de logro en que sus hijos quedaran en la primera opción y un 80%, dentro de las tres primeras. Los grados de satisfacción debieran ser bastante altos”, afirmó el Dr. Sobarzo. “Estamos lejos de la caricatura de una tómbola que elige a los estudiantes. Se trata de un algoritmo que busca mayor inclusión e integración”, considera el Dr. Retamal.

En Santiago, el SAE solo aplicará para ingresar a prekínder, kínder, 1° básico, 7° básico y 1° medio. El resto de los niveles se incluirá en 2020. En regiones, esto último ya está en marcha.

Selección

Pese al SAE aún existe grupo de establecimientos, como el Instituto Nacional o el Liceo 1, que podrán seguir seleccionando sobre la base de sus propios mecanismos. Sin embargo, el porcentaje de estudiantes que escogerán irá disminuyendo progresivamente, hasta llegar al 30% en 2022. Actualmente, el Gobierno busca que más colegios tengan la facultad de seleccionar esta cuota según sus criterios.

Para los expertos, esta política desconoce que todos los colegios deben estar preparados para educar de la mejor forma posible y lograr que cualquier tipo de estudiante tenga buenos resultados independiente de su capital cultural, social o económico, a fin de que se garantice el derecho a la educación.

“Si esto prospera, sería contradictorio con el proyecto de admisión, que lo que busca es garantizar las mismas condiciones para todos los niños y jóvenes de este país”, consideró Sobarzo. “Es un proyecto de ley que busca retroceder en la idea original del sistema, que es entregar mayor democracia al sistema escolar y no darle más facultades a los directivos para que discriminen a los estudiantes que van a sus establecimientos”, concluyó Retamal.

Autor: 
Cristóbal Miranda Ríos