Estas fotografías son una propuesta de diálogo entre la singularidad de la existencia (un lleno en el espacio) y la nada. Enfrentamiento silencioso y pausado entre luces y sombras en cada contenido revelado de la imagen, que permiten ser contemplación y reflexión de un instante capturado y congelado.
Un instante que nos habla de la huella, la permanencia de las estructuras en un lugar, consecuencia de la creación humana e intervención en el espacio en que se habita. Nacimiento de una identidad sugerida y efímera en constante cambio que la fotografía permite documentar y eternizar.
Recurso de la memoria frágil que permite recordar, así como herramienta que permite estudiar la historia de la sociedad y un lugar.
La fotografía es memoria, es permanencia, es un acto lúdico “del capturar la existencia de un momento”, intención y reflejo de la subjetividad del fotógrafo, enfrentamiento entre realidad y subjetividad en un solo acto, síntesis del capturar convertida en lo que hoy llamamos fotografía.
Manuel Urra
Fotógrafo Departamento de Comunicaciones y Medios
