Walter Kühne aporta mirada sicológica al análisis de clásicos del cine en ARTV

  • Como “una invitación a pensar las películas a través de metáforas que visualizan los dilemas humanos”, define el psicólogo Walter Kühne Covarrubias el programa ‘Cineclub’ que conduce en la señal de cable ARTV. El espacio, de gran acogida a nivel nacional, se emite cada lunes a las 22:30 horas, con repeticiones durante la semana. El profesional es director de la Unidad de Promoción de la Salud Psicológica, dependiente de la Vicerrectoría de Apoyo al Estudiante (VRAE) de nuestra Corporación.
 
 



“Todo partió tras la realización de un ciclo de cine de terror en el canal ARTV”,  dice el psicólogo y director de la Unidad de Promoción de la Salud Psicológica dependiente de la Vicerrectoría de Apoyo al Estudiante (VRAE) de nuestra Corporación, Walter Kühne Covarrubias, al explicar su participación en ‘Cineclub’, novedosa propuesta televisiva que desde la psicología analiza los grandes clásicos del cine mundial.

La propuesta establece un recorrido por cintas cinematográficas cuyo valor ha traspasado generaciones y que hoy se yerguen como verdaderas joyas del séptimo arte; tanto por su veta precursora como por su factura artística.

“Hay veces que las películas no son tan buenas, pero tienen un valor en el sentido de su lugar en la historia del cine. Por ejemplo ‘White Zombie’, de 1932, una de las cintas examinadas, no es una pieza tan buena, sin embargo su mérito consiste en que es la primera película en la historia del cine donde hay zombies”, explica.

En esa línea, el psicólogo estima que problematizar ese tipo de películas, permiten que el espectador se forje una visión más integral sobre desarrollo del cine y sus temáticas.

A través de ‘White Zombie’, “se puede ver cómo ha cambiado este monstruo en el cine, que deriva del vudú haitiano, y es muy distinto al que hoy encontramos en series como ‘The walking Dead’ que nace por la acción de un virus y cuyo extermino depende del uso de una arma”, explica el psicólogo.

Agrega que “el programa solo incluye clásicos, lo que es súper interesante porque estos, en el fondo, son la base del cine que se realiza actualmente”.

‘Cineclub’ se transmite cada lunes a las 22:30 horas, con repeticiones el jueves (a las 12:00), viernes (a las 09:00), sábados (a las 07:30) y los domingo (a las 05:00).

Aprendizaje

Si bien Walter Kühne se autodefine como un cinéfilo, hacer ‘Cineclub’ le ha impuesto la tarea de adentrarse aún más en el celuloide, y apreciar otras obras que escapan de su gusto, y que son propuestas por el equipo realizador del espacio.

“Hay varias películas que son de cine antiguo, que yo no conocía y que verlas  ha sido realmente  interesante y que he disfrutado mucho. Es como que estuviera profundizando de forma sistemática en algo que para mí había sido solamente entretención”, reflexiona.

Además, reconoce que nuestra Universidad ha tenido un impacto relevante en el tono del programa. Como estudiante del Doctorado en Psicología de nuestro Plantel, Walter Kühne  asistió a algunas cátedras de cine y psicología a cargo de la Dra. Irene Magaña, académica del plan de estudios.

“Es un doctorado de nuestra Universidad el que tiene estos ramos, y para mí fueron fundamentales para hacer el programa después”, enfatiza.

 “Lo que caracteriza a ‘Cineclub’ es un análisis psicológico, donde la primera parte, básicamente, consiste en una presentación con datos de la película (su director y reparto), y al final hay un comentario que trata sobre los personajes o algún tema de la problemática”, afirma Walter Kühne.

“En el fondo la idea es entender los personajes desde la dimensión psicológica y tratar que el espectador se piense a sí mismo al analizarlos”, dice mientras subraya que la apuesta “es tratar de que el cine sirva para que las personas reflexionen sobre sí mismas y la sociedad”.

Comentarios

Los comentarios que recibe le resaltan que el programa tiene un enfoque novedoso, considerando que generalmente los espacios de cine critican las películas, estableciendo criterios de calidad como una manual para entender la obra.

“El crítico ve la película y dice si amerita ser vista o no. Para mí el tema más allá de que ésta sea buena o mala, es ver que podemos extraer para poder pensar. El cine puede servir como metáforas para que la persona piense sus propios problemas”, explica.

Desde un vendedor de libros hasta un jardinero cruza la amplia gama de espectadores que han agradecido el enfoque innovador e inclusivo del espacio, lo que para él responde a que cualquier individuo, independiente de su condición, puede meditar sobre la vida y el mundo.

“La otra vez en El Belloto, en la placita que hay afuera, estaba en el kiosco tomándome una bebida, y se me acercó un jardinero y me comentó que a Bela Lugosi (actor clásico del género de terror) lo escogieron para el papel de Drácula porque tenía el acento ideal”, recuerda. 

Añade que “en ese sentido, el jardinero constituye un ejemplo de que cualquiera puede disfrutar una película y luego reflexionar sobre la vida y del alto impacto que tiene la producción televisiva”.

 “Cada programa lo ven alrededor de 16 mil personas, y que esa cantidad  piense y reflexione, me parece que cumple con el objetivo trazado para el espacio”, finaliza.