Nuevos profesionales para la arquitectura

  • Cuarenta y ocho arquitectos y dos magísteres en Diseño Arquitectónico, recibieron sus títulos y grados académicos, respectivamente, en ceremonia realizada en el Aula Magna de la Universidad.
     




Durante la ceremonia se enfatizó que los arquitectos del Plantel deben poner sus conocimientos al servicio de las necesidades del país.

En la ocasión, el director de la Escuela de Arquitectura, Jorge Lobiano Yaber, realizó un llamado a los nuevos profesionales, a que realicen un ejercicio guiado por las necesidades presentes en el país, y siguiendo el perfil de compromiso social fomentado por la Institución.

A la vez, les instó a poner la arquitectura al servicio de los problemas comunes de las personas, a través de pequeñas acciones concretas que valoricen lo cotidiano.

“Hago un llamado a ponerse grandes desafíos, pero partir por pequeñas acciones. Nuestro oficio no es discursivo, sino hacedor”, expresó el director.

En este punto de su discurso, el académico hizo referencia a una reciente encuesta, que reveló que para las pobladoras chilenas, la necesidad más importante es acceder a agua caliente.

Agrego que tal panorama, requiere que la arquitectura sea entendida desde la perspectiva de ofrecer, a través del diseño, soluciones a este tipo de problemáticas, todo bajo la premisa de que siempre “se puede hacer un diseño arquitectónico más eficiente y eficaz”.

“Desde el agua caliente, se podría pensar una reagrupación de las casas, un nuevo urbanismo que minimice las redes para que no se pierda calor, o una pequeña planta de energía solar que caliente el agua y agrupe las viviendas en torno a eso”, reflexionó Lobiano.

Lo importante es comprender que “se puede hacer una arquitectura tremendamente trascendente, pero pensada desde el agua caliente y no desde problemas teóricos que nos ponemos solo en la academia”, enfatizó.

Cuatro ejes formativos

Destacó el director que los estudiantes de la Escuela de Arquitectura “salen al mundo que tenemos, y no al que queremos”. Por eso, su unidad académica entiende la relevancia de promover un perfil profesional que ponga los conocimientos adquiridos a disposición de la sociedad, y entienda que mediante su quehacer, esta puede salir de subdesarrollo.

En ese sentido, la formación vislumbra cuatros ejes que fortalecen ese perfil.

En primer lugar, un programa de prácticas profesionales, en zonas vulnerables, donde los estudiantes trabajan y diseñan en base a las necesidades que tiene la comunidad a la que asisten.

En segundo lugar, el programa de Aprendizaje más Servicio, en el que durante un año, los en ciernes arquitectos trabajan con comunidades, para captar sus necesidades y ofrecer respuestas mediante el diseño.

En tercer lugar, un porcentaje importante de jóvenes cada año se adscribe a los programas de movilidad estudiantil, lo que les permite contrastar la realidad nacional con la que hay en el extranjero.

Y en cuarto lugar, la asidua participación de estudiantes- propiciada en el marco del taller de quinto año- en concursos de prestigio como el Corma y el Cap, donde se miden con sus pares de las 40 escuelas de Arquitectura que existen en el país, en base a sus ideas y productos de calidad.

Al respecto, el director Lobiano destacó que estos lineamientos, permiten que el arquitecto formado en nuestra Casa de Estudios, ponga sus conocimientos al servicio de las necesidades del país, tal como las grandes directrices que definen a nuestra Casa de Estudios.

“Esos cuatro ejes formativos, le dan a los estudiantes unas herramientas para salir a ejercer la profesión de esta manera y no de otra”, declaró la autoridad.

Reconocimientos especiales

En la ocasión, también hubo espacio para reconocer el esfuerzo y a quienes prestigian la profesión.

Pilar Peterson Paredes, Paulina Riesco Sepúlveda y Cristián Romero Serrano fueron laureados como los mejores estudiantes de la promoción 2015.

También, la profesora Jimena Morales recibió el premio a la trayectoria académica, mientras que el arquitecto de dilatada trayectoria Humberto Elias fue honrado con la Medalla al Mérito, luego de una votación que incluyó a todos los académicos de la Escuela de Arquitectura.

Intervención del arquitecto Eliash

A través de un archivo audiovisual, Eliash dirigió unas palabras a los graduados, centradas en el rol que debe tener la arquitectura con miras a conducir a nuestro país hacia el desarrollo.

“El gran tema de hoy es la desigualdad en Chile. Ya no es la extrema pobreza, la desnutrición ni la cobertura de servicios básicos”, sostuvo.

“La única forma de corregirla, es con políticas públicas bien administradas, que sean capaces de balancear lo público con lo privado, y de esa forma acercar los extremos sociales, que permitan concebir una estructura de un país más justo y que, por lo tanto, sea socialmente más estable”, añadió.

En esa línea, el homenajeado conminó a las y los nuevos arquitectos de nuestra universidad, a tomar un rol protagónico en este proceso, tal como lo hicieron durante las movilizaciones de 2007 que culminaron en posicionar el tema de la educación gratuita y de calidad como una prioridad nacional.

“Ustedes como generación, están saliendo al mundo profesional en un escenario difícil, pero cargan sobre sus espaldas una responsabilidad histórica. (…) No son una generación más de arquitectos o universitarios, son una que tiene un compromiso con el país que lo han adquirido en esas jornadas de movilización. Ustedes han puesto la educación en el lugar que merecían estar”, declaró.

Humberto Eliash sostuvo que es necesario fortalecer la arquitectura pública, porque al igual que la educación, ambas contribuyen al desarrollo de Chile.

Para eso, declaró que es fundamental conciliar cantidad con calidad, avanzar a mayores estándares de sustentabilidad e incorporar la innovación en la arquitectura.