Investigadora recopila narrativas de profesores para desarrollar instrumento que mejore sus competencias

  • Profesores con reconocida trayectoria en las salas de clases de colegios de la Región Metropolitana se reunieron en un taller de narrativa con pares que recién comienzan su carrera laboral. La iniciativa, a cargo de la Dra. Erika Castillo, busca observar la trayectoria del docente en servicio desde el desempeño y no desde supuestos, por lo cual trabaja en el desarrollo de un mapa de competencias y un software con recursos de un proyecto Fondef (código CA131/10178). “Las narrativas permiten identificar experiencias reales del desempeño de un docente en el proceso de enseñanza”, expresa la Dra. Castillo.

 



El pasado sábado (29), profesores de diferentes colegios de la Región Metropolitana se reunieron en nuestra Casa de Estudios para participar de un Taller de Narrativa, actividad enmarcada en el proyecto Fondef (código CA131/10178) “Generación de un mapa de competencias para la trayectoria de los docentes en servicio y de un software de monitoreo”, a cargo de la Dra. Erika Castillo, integrante de la Unidad de Innovación Educativa (UNIE) de nuestra Universidad.

Para este taller, se convocó a docentes que están en sus primeros años laborales y también a un subconjunto de profesores que tienen muchísima experiencia, y que, desde el juicio del equipo organizador, son profesores expertos.

Esta selección permitió reunir dos realidades diferentes: por una parte, los profesores que están recién iniciándose y están sintiendo el agobio de la inserción laboral, por lo que muchas de las situaciones a las que se enfrentan no saben como manejarlas o no tienen una respuesta rápida, y otro grupo que puede a través de sus experiencias aportar nuevas herramientas a sus colegas.

En este sentido, “las narrativas permiten identificar experiencias reales del desempeño de un docente en el proceso de enseñanza. Nosotros lo que tenemos en el proyecto es una preocupación muy importante por el contexto en que se desempeña la docencia, por toda la revisión que hemos hecho y todas las sugerencias de expertos que hemos tenido, podemos decir que es la narrativa la que nos permite hacer esa vinculación con la descripción del mapa y la realidad que vive un docente cuando enseña”, señaló la directora del estudio.

En el taller se invitó a cada profesor y profesora a tratar de pensar en un episodio relevante de la enseñanza de la lengua y la literatura con sus estudiantes, para que con esos episodios puedan contrastar de la manera más real el mapa que el equipo de investigación está formulando.

¿Por qué un mapa de competencias?

Según indicó la Dra. Castillo, la propuesta de desarrollar un mapa de competencias para la trayectoria de los docentes en servicio tiene que ver con la idea de salir de los lugares comunes.  “Cuando tú escuchas planteamientos como ‘el profesor tiene que saber todo lo que tiene que enseñar y tiene que saber adecuarse a las necesidades de aprendizaje de todos sus estudiantes’, es complejo y caben varias preguntas sobre un profesor recién egresado de la universidad ¿puede adecuarse a todas las necesidades de sus estudiantes? ¿Cómo puede el profesor graduar los niveles de dificultad que conoce en su disciplina para el tipo de estudiante con el que está trabajando? Es decir, de qué manera garantiza que puede hacer progresar esa graduación de manera importante respecto de sus estudiantes y no ser una copia de una clase universitaria tradicional, enciclopédica en un segundo medio”, explicó la académica.

Para este equipo de investigación es importante mirar la trayectoria del docente en servicio desde el desempeño y no desde supuestos, lo que significa saber qué pasa en la enseñanza de la comprensión lectora, qué pasa con la enseñanza de la literatura y los criterios para el análisis literario, entre otros, no solo abordando elementos generales pedagógicos sino que comprometiéndose a ver cómo es enseñada la disciplina en una situación inicial, en una situación de mayor robustez académica. La idea es proporcionar una descripción que pueda ser útil, porque Chile cuenta con estándares orientadores para la formación inicial docente, instrumentos muy trabajados, no obstante, al revisarlos se observa que contienen indicadores que no son esperables para un egresado sino que para un experto.

“Nosotros estamos viendo de qué manera ponemos esto en perspectiva, lo que puede ser muy útil desde el punto de vista de acciones futuras o discusiones que están hoy en día, como la carrera docente, cómo se va a evaluar a un profesor, si desde los aspectos generales o la enseñanza de su amplio conocimiento, y si es así, el mapa puede ser un instrumento de mucha utilidad “, plantea la Dra. Castillo.

Visión de los profesores

En la actividad participaron profesores de diferentes colegios de la región, entre ellos, Juan Domingo Vera, profesor de castellano, quien trabajó cerca de 30 años en el Colegio Hebreo y actualmente se desempeña en el Departamento de Lingüística y Literatura de nuestra Universidad, quien expresó que “es muy importante que existan iniciativas como este proyecto, en que se trata de crear instrumentos, estrategias y formas de ayuda al desempeño de los profesores para que ellos se sientan respaldados por el sistema. La manera de mejorar las competencias docentes es que el propio profesor se mire en su quehacer y también otros le puedan dar una opinión de lo que está haciendo. Esta profesión implica un permanente estudio y estar compartiendo con los pares para mejorar el trabajo de uno”.

Por su parte,  Ana María Moreira, profesora de lenguaje en La Maisonnette, con más de 26 años de trayectoria en el aula, fue contactada para referirse a experiencias exitosas en el aula. “Me interesa la difusión de buenas prácticas, porque siento que en este momento el rol de los agentes educativos, tanto los profesores como los estudiantes, ha ido cambiando porque esta es un sociedad distinta a la cual yo me formé como docente y eso implica que uno siempre está revisando sus prácticas, actualizándose y adecuándose a los nuevos agentes educativos. Soy una convencida que mientras estemos en comunidad vamos a poder ir apoyándonos unos a otros y, en ese sentido, creo que este taller nos va a servir para mejorar prácticas, vernos en nuestra tarea como docentes y también en reflexionar sobre nuestro rol como agentes en este cambio paradigmático de la sociedad, basada en la tecnología fundamentalmente”, detalló.

En la actividad también estuvo presente Catalina Ramírez, profesora de castellano del Colegio Mater Purísima de Maipú, quien además es egresada de la U. de Santiago de Chile y cuya memoria de titulo estuvo vinculada a este proyecto Fondef. “Conozco las bases del proyecto y lo que busca es algo totalmente novedoso, la educación tiene cimientos tan antiguos que este proyecto lo que hace es refrescar ese sistema, cómo formamos a los profesores y qué tenemos que hacer, porque el tiempo está pasando rápido y tenemos que saber cómo adaptarnos y ver nuevas forma de hacer docencia”, explicó.