Eje Alameda/Nueva Providencia debe recuperar el protagonismo del espacio público por sobre su funcionalidad vial

Para el académico de la Escuela de Arquitectura de nuestro Plantel, Jonás Figueroa, antes de reformular la Avenida Libertador Bernardo O`Higgins, conocida como la antigua Alameda, “se debe atender la opinión de los vecinos sobre los cambios que se proponen para esta calle mayor, la madre de todas las explanadas”. El urbanista agrega que debe surgir una propuesta estructurante y estratégica de diseño urbano, que recupere el protagonismo del espacio público por sobre su funcionalidad vial, tal como sucede en otras capitales del mundo.
“Habiendo muchas otras alamedas en las ciudades de la región, que requieren con urgencia de la atención de las autoridades ministeriales y comunales, sugiero abrir un periodo de debates y participación pública, atendiendo la opinión de los vecinos sobre los cambios que se proponen para esta calle mayor, la madre de todas las explanadas”, sugiere el urbanista.


En junio pasado, fueron revelados los cinco proyectos seleccionados en la primera etapa del Concurso Internacional Nueva Alameda-Providencia, que busca cambiarle la cara a tan importante eje vial que cruza las comunas de Lo Prado, Estación Central, Santiago y Providencia.

El certamen, convocado por el Directorio de Transporte Público Metropolitano (DTP), compuesto por los ministros de Transporte y Telecomunicaciones, Vivienda y Urbanismo, Obras Públicas y el Intendente metropolitano, tiene como fin -a través de una licitación pública- adjudicar el desarrollo y ejecución de un plan de renovación para las avenidas Libertador Bernardo O’Higgins, Providencia y Nueva Providencia, durante el primer semestre del año 2017.

La transformación planificada, comprende 11,8 kilómetros de trazado, desde Pajaritos, en el poniente; hasta Tobalaba, en el oriente. La idea, consiste en mejorar el espacio público y tiempos de desplazamiento, resaltando la riqueza arquitectónica que contiene la vía, en consonancia con las necesidades de la población.

Para el académico de la Escuela de Arquitectura de nuestro Platel, Jonás Figueroa, antes de reformular ‘la Alameda’, es necesario que todos los actores participen en un debate público, de más largo aliento, donde puedan ofrecer sus perspectivas enriquecedoras.

“Habiendo muchas otras alamedas en las ciudades de la región, que requieren con urgencia de la atención de las autoridades ministeriales y comunales, sugiero abrir un periodo de debates y participación pública, atendiendo la opinión de los vecinos sobre los cambios que se proponen para esta calle mayor, la madre de todas las explanadas”, sugiere el urbanista.

Algo de Historia

‘La Alameda de las Delicias’, se forjó como tal en 1818, luego que Bernardo O’Higgins entendiera el espacio como un lugar de paseo, coronándolo con la plantación de innumerables álamos. Antes, había sido un brazo del río Mapocho, que con el paso del tiempo se convirtió en un sitio de acumulación de desperdicios y basura.

Si en el siglo XIX, fue el paseo obligado de la clase alta nacional, y cúmulo de obras arquitectónicas de gran valor artístico, la inclusión de autos por su sendero y la construcción de la línea 1 del metro de Santiago, bajo tierra, la desarraigaron de su pasado colmado de boato.

“La Alameda es un vestigio arqueológico construido por miles de avenidas del río Mapocho; es la explanada de los templos y conventos coloniales; es el salón urbano de República, el paseo huérfano de monumentos y fuentes de agua que la modernidad tecnológica se encargó de sepultar bajo miles de toneladas de tierra”, señala Jonás Figueroa.

En esa línea, cree el académico que “a estas alturas de nuestra historia republicana, necesitamos devolvérsela a los ciudadanos, evitando que los automóviles sigan expulsando al peatón del espacio público por una cuestionable funcionalidad, que prima la resolución de la congestión por sobre la accesibilidad”.

Sobre la selección

Figueroa cree que los proyectos seleccionados denotan una preocupación por perfeccionar la vialidad del conjunto, pero no por constituirla como una estructura dialogante con su entorno.

“Hay una gran atención por la vialidad, el mismo que políticos y modernos le confirieron a partir de la mitad del siglo XX. Sin embargo, se echa en falta una propuesta estructurante y estratégica de diseño urbano, que recupere el protagonismo del espacio público por sobre su funcionalidad vial y atienda las relaciones transversales del tejido, enfatizando sus actuales propiedades de calle mayor de la ciudad”, afirma el urbanista.

En ese sentido, el experto piensa que  los diseños no incorporan en su tramado, los lugares o emplazamientos cuya historia y costumbres propias de Santiago son dignos de preservar, y que otras emblemáticas avenidas en el mundo si adscriben.

“A diferencia de la huella neoyorquina que va  articulando cada cierto trecho momentos singulares en la trama urbana de Manhattan, tejiendo un rosario de situaciones seductoras (Union Square, Madison Square, Times Square, Columbus Circles, etcétera), esta huella nuestra pasa como si nada por la ciudad. Al menos así la ven los proponentes, desconociendo valores de la trama urbana que se asoman a ella”, reflexiona.

Las propuestas seleccionadas

Las cinco propuestas, según consigna el sitio http://www.nuevaalamedaprovidencia.cl/(link is external), son las siguientes:

“1) “Alameda 20.30″. País: España.

La Propuesta fue seleccionada por su fuerte énfasis en desarrollar una “estrategia” o plan director integral para el corredor de transporte. Se valoró la elaboración metodológica y las estrategias de planificación urbana basada en la integración de usos del suelo y nodos de transporte para crear potenciales nuevos subcentros, y la organización de la trama vial en base a “supermanzanas”, como una forma de reducir la congestión y los cruces de vehículos en el eje.

2) “Centro extendido, ensanche Alameda – Providencia”. País: Chile.

La Propuesta fue seleccionada por una visión tradicional de desarrollo urbano basado en la creación de sistemas de pares viales y ensanches con la Alameda (Ecuador-Tarapaca-Alonso Ovalle–Marcoleta), con énfasis en la promoción de la renovación urbana del tramo poniente de la Alameda. Se valoró el diseño del sistema de paraderos del BRT,  la propuesta de grandes plazas cívicas a lo largo del eje,  la ampliación de los espacios públicos y el soterramiento de la Avenida Andrés Bello.

3) “Estrategia Santiago sustentable: un proyecto de integración urbana en tres fases”. País: Francia.

La Propuesta fue seleccionada por presentar una visión más amplia del sistema de transporte y de la evolución en etapas temporales del uso del espacio público. Lo anterior basado en  el desarrollo de pares viales o “ensanches” y alternativas de redes de transporte público paralelas y complementarias al sistema BRT del eje.  Se valoraron las propuestas de renovación urbana del sector poniente del eje en el par Avenida Ecuador y Alameda Poniente.

4) “Eje Nueva Alameda Providencia (Eap) 2020: Regeneración Urbana, Eficiencia Funcional Y Equidad Territorial”. País: Chile.

La Propuesta fue seleccionada por su visión unitaria, patrimonial y ciudadana del eje. Por el fortalecimiento y ampliación de sus espacios públicos. Se destaca un sólido planteamiento de transportes mediante un diseño del sistema de BRT y de los puntos de regulación de frecuencia en los principales nodos del eje, como la Plaza Baquedano, Estación Central y Pajaritos. Además se destacó el diseño urbano del denominado Nodo Ecuador, por su extraordinaria relevancia en términos de imagen metropolitana,  las ideas de nuevos puentes sobre el rio Mapocho en el sector de Plaza Baquedano.

5) “Flujos Integrados, Recuperación De Espacio Público Y El Paisaje En El Eje Alameda Providencia”. País: Consorcio Anglo-Chileno.

La Propuesta fue seleccionada por la calidad, sobriedad y visión unitaria del tratamiento del espacio público, por fortalecer los principales nodos de transporte metropolitano del eje y el sistema de áreas verdes y de sistemas de aguas (metáfora de restauración del brazo histórico del rio Mapocho). Presenta atractivas secciones de las avenidas que integran la interconexión BRT / Metro y el uso compartido del espacio vial para autos, peatones y bicicletas, con descarga de buses a la derecha y la izquierda ajustándose a las condiciones del contexto. La solución de Plaza Baquedano es muy sugerente y muy atractiva”.

Autor: 
Fernando Abarca Back