Cinta de animación ganó el primer Festival de Cine de la U. de Santiago

  • "Raíces de pólvora" del director Ernesto León fue elegido como el mejor cortometraje entre diez que se presentaron durante este concurso que fue organizado por el Taller de Realización Cinematográfico del Departamento de Gestión del Deporte y Cultura. La obra animada fue inspirada en la dramática experiencia de menores que se ven forzados a participar en conflictos bélicos en países africanos y latinoamericanos. 

 



"Raíces de pólvora" del director Ernesto León fue elegido como el mejor cortometraje entre diez que se presentaron durante este concurso que fue organizado por el Taller de Realización Cinematográfico del Departamento de Gestión del Deporte y Cultura.

La obra animada fue inspirada en la dramática experiencia de menores que se ven forzados a participar en conflictos bélicos en países africanos y latinoamericanos.

Los organizadores explicaron que el objetivo de la actividad es dar espacio a jóvenes emergentes y contribuir a renovar la industria del séptimo arte en Chile.

Jurado

El jurado estuvo integrado por su presidente el psicólogo y comentarista del programa Cine Club de Artv, Walter Kühne; el director y productor de cine, Erick Aeschlimann; y el profesor de teatro de la Universidad de Santiago, Mario Gatica, quienes destacaron la gran calidad y variedad de los trabajos que se presentaron y la variedad de formatos expuestos.

“Los cortometrajes son de un alto nivel y pudimos ver gente muy joven participando y haciendo cine de una manera muy profesional”, señaló el presidente del comité evaluador.

Kühne resaltó la gran cantidad de formatos -documentales, ficción, cine arte, experimental y animación- lo que permite complementar la formación artística y personal de los estudiantes.

Respecto a la calidad de las obras que se presentaron, puntualizó que “estas son de un alto nivel, con gente muy joven participando y haciendo cine de manera muy profesional”.

A su vez, Erick Aeschlimann expresó que “es extraordinario ver este tipo de actividades en el ámbito universitario, algo que no es muy habitual. Por lo mismo, que se generen estas iniciativas me parece fabuloso, sobre todo cuando estamos en un momento súper interesante del cine chileno, con mucho talento manifiesto”.

El profesor Mario Gatica manifestó que “cuando un video genera una sensación con algo desconocido y a eso le sumamos la emoción que provoca, podemos decir que estamos frente a un buen trabajo”. Por lo mismo, es valioso este tipo de actividades culturales, contando con el respaldo de esta Universidad”.

La obra ganadora

Dos balas se enfrentan, mientras que en paralelo, dos infantes son secuestrados de sus familias, hasta que finalmente las municiones y los niños se encuentran.

De esta manera el cortometraje animado ganador (“Raíces de pólvora”) expresa la dura realidad de países africanos y latinoamericanos, donde los pequeños son despojados su infancia al verse obligados a enrolarse en ejércitos paramilitares.

El director Ernesto León agradeció el reconocimiento e indicó que “aquí hay varios ganadores, debido a que pese a tener visiones distintas, tenemos resultados originales”.

León reveló que tardó nueve meses en desarrollar el trabajo y transmitió a los jóvenes que se atrevan a crear cine y que no tengan miedo, porque deben hacer lo que sienten. “Siempre habrá personas a las que les va a agradar el resultado que se obtenga”, enfatizó.

Puntualizó que tardó nueve meses en desarrollar el trabajo. “Queríamos aportar con la animación de una forma distinta, porque normalmente este estilo contribuye desde el punto de vista de la ficción, pero nosotros lo abordamos desde un problema social”, enfatizó.

El presidente del jurado, manifestó que “el ganador tenía un mensaje claro desde un principio hasta el fin de la cinta. Está bien contado, fluye sin problemas, con una narración que se mantiene y un conflicto que va en tensión constantemente. Además, es un corto muy difícil de hacer, porque la animación requiere de mucho trabajo”.

Participantes

Los cortometrajes participantes fueron: "Suipacha" de Florencia Dupont y Nico Superby, de la Escuela de Cine de Chile; "Raíces de pólvora", de Ernesto León, de la Universidad Mayor; "Donde ya no paran" de Pablo Rauld, de la Carrera de Cine + Tv de la Universidad de Chile, y "Nosotros (tú y yo)", de Germán Saavedra, de la Productora Germán Saavedra.
 

También, “Radio diferencia", de Sebastián Peralta, de la Universidad de Valparaíso; "Lenguas muertas", de Nicolasa Huerta y Arantxa Alcaíno, de la Universidad de las Américas; "Retorno", de Ronald Pereira, del Grupo 234, y "Terra", de Vicente Canales, de la Universidad Mayor.


Finalmente, “Mi gran amor, mi gran locura”, de Pablo Flores, del Taller de Realización Cinematográfico de la Universidad de Santiago; y “Niño perro” dirigido por Mario Ferrera, Maximiliano Iturra y Bastián Pozo, que en 2011 cursaban sexto básico en el colegio Saint Mary Joseph School de Colina.

Renovar el cine

La actividad estuvo coordinada por el profesor Cristián Herrera, del Taller de Realización Cinematográfico del Departamento de Gestión del Deporte y Cultura del Plantel, junto a los estudiantes Ignacio Covarrubias y Nicolás Montenegro.

Al concluir la actividad, expresaron que el objetivo es dar espacio a jóvenes emergentes y poder actualizar la industria del séptimo arte en el país.

Ignacio Covarrubias expresó que “es un festival donde tienen espacio realizadores emergentes para generar vínculos y redes, de tal manera que se puede fortalecer el futuro cinematográfico en Chile. Es decir, que sea una instancia para poder renovar el cine chileno”.

“Con estos cortometrajes nos permite darnos cuenta que se puede hacer cine de calidad y con poco presupuesto”, concluyó.