Académica propone utilizar desechos agrícolas para descontaminar aguas de plantas textiles

  • Reducir los efectos de las descargas de aguas residuales de las plantas textiles en el medio ambiente, es un desafío pendiente. Los colorantes en los ecosistemas naturales disminuyen los procesos fotosintéticos, generando actividad mutagénica en organismos acuáticos.


A lo largo del tiempo se han propuesto diversas fórmulas para la remoción de contaminantes producidos por las fábricas textiles, desde procesos físico-químicos, biológicos, hasta alternativas híbridas. En esta línea, la académica de nuestra Universidad, Dra. Luisa Sepúlveda, trabaja en el estudio “Valorización de residuos agrícolas como adsorbente (aglutinante) para remover colorantes desde aguas residuales textiles”.

El proyecto, financiado por el  Departamento de Gestión de Proyectos de  Investigaciones Científicas de la Vicerrectoría de Investigación, Desarrollo e Innovación, estudia la factibilidad de utilizar residuos agrícolas  -principalmente paja de trigo y hojas de maíz-  como adsorbentes de bajo costo, para remover colorantes textiles de las aguas residuales y así remplazar el uso del carbón.

La Dra. Sepúlveda y su par Elsa Contreras –co-investigadora del proyecto- estudiaron anteriormente  la viabilidad de utilizar la turba magallánica (Sphagnum magallanicum) como adsorbente, debido a las características físico-químicas y capacidad de adsorción de colorantes ácidos, básicos y reactivos que presenta. Sin embargo,  su utilización en la remoción de este tipo de contaminante no es sustentable, porque la sobre explotación podría causar graves daños en la fijación de dióxido de carbono atmosférico.

En la búsqueda de alternativas, la académica se percató que los residuos de la actividad agrícola son abundantes y presentan problemas de manejo, los que en ocasiones causan graves daños medioambientales, ya sea por su acumulación o por las quemas para reducirlos. Sin embargo,  estos desechos también pueden tener un valor agregado, reutilizándolos para producir biocombustibles, como el bioetanol, metano y biodiesel; o en biomateriales, como adsorbentes.

Durante los tres años que dura este proyecto, la investigadora evaluará la utilización de estos residuos agrícolas como bioadsorbentes. En una primera etapa, se realizará una caracterización físico-química de los materiales, modificando sus características superficiales para incrementar sus capacidades de adsorción.

Además, se estudiará la remoción de colorantes de aguas residuales, mediante pruebas experimentales de contacto entre el sólido y el agua, y se medirá la disminución de la concentración del contaminante.

Para Luisa Sepúlveda lo importante del proyecto es la valoración y reutilización de los residuos agrícolas en diversos productos, como biomateriales, biocombustibles; la producción de enzimas y productos biotecnológicos, como ácidos lácticos que tienen grandes potenciales debido a su abundancia, bajo costo y sustentabilidad.