Participación activa de jóvenes en Seminario de Historia

  • La segunda jornada del Seminario “A 40 años del Golpe de Estado en Chile: usos y abusos en la historia”, actividad organizada por el Departamento de Historia de la Universidad, junto a otras universidades chilenas, estuvo marcada por la masiva presencia de jóvenes, especialmente en los temas relacionados con memoria. La profesora de la Universidad de Santiago y de la Universidad Diego Portales, Verónica Valdivia, reconoció que los tópicos relacionados con la historia de Chile en las últimas décadas han cobrado relevancia para las nuevas generaciones, “la gente joven que está interesada en conocer temas que hace unos años eran muy áridos, como historia económica o historia política. Hay una revitalización de todo”, señaló.


Durante la mañana de ayer (martes 3), las salas del Centro Cultural GAM se llenaron con asistentes al Seminario “A 40 años del Golpe de Estado en Chile: usos y abusos en la historia”, actividad organizada por el Departamento de Historia de la Universidad, junto a otras universidades chilenas. La concurrencia, en su mayoría jóvenes, evidenció el interés por reflexionar y analizar el país que hemos construido desde el quiebre institucional de 1973.

En la mesa Memoria y transmisión intergeneracional, Tamara Vidaurrázaga, periodista egresada de la Universidad de Santiago y magíster en Estudios de Género de la Universidad de Chile, manifestó que esta participación es valiosa para el desarrollo de la democracia, porque muchos de sus contemporáneos aún sufren “el temor a transgredir ciertas normas, por miedo a lo que puede pasar. Las nuevas generaciones desconocen esa sensación y, es eso mismo, lo que las hace potencialmente fuertes”, dijo.

El destacado historiador norteamericano Steve J. Sternagrega que los jóvenes han avanzado en reconstruir la memoria. “Yo creo que se ha llegado a acuerdo entre los jóvenes, es decir, están en otra parte, aceptan, no todos pero la mayoría, que no era aceptable lo que se hizo y que la generación anterior no lo manejó bien. En ese sentido los jóvenes están mucho más allá que la sociedad de los mayores que están metidos en sus conflictos. La memoria sigue importando, pero las nuevas generaciones van resignificando lo que es memoria”.

Polarización

Sin embargo, la división de las opiniones a pocos meses de la elección presidencial es un tema que también concentra la atención de los analistas de las ciencias sociales. Johana Hölh, investigadora de la Universidad Libre de Berlín estudió la división de los chilenos en torno a la figura de Pinochet. Y aunque han pasado años, la polarización parece presente permanentemente. No obstante, la investigadora confía en las nuevas generaciones, cuya  experiencia comparó con la de los hijos de quienes sufrieron la Segunda Guerra Mundial en Alemania. “La memoria se usa para construir algo nuevo y, con eso, se hace una renovación del tema”, planteó agregando que se hace necesaria, eso sí, una “renovación política con un diálogo abierto”.

Desde el punto de vista de la psicología, Ximena Faúndez, de la Universidad Católica, planteó que parte de la “estrategia para superar el trauma implica reconocer que hubo situaciones extremas de las que aún no se habla”. Y aseguró que “falta justicia y verdad, porque eso permitiría dar la condición de ciudadanos a quienes vivieron la dictadura. Eso ayudaría a todos a limitar estas memorias en disputa”.

Finalmente, para Vidaurrázaga aún queda camino para disminuir la polarización. “Faltan tres premisas básicas por cumplir a cabalidad: justicia, verdad y reparación. El origen de la polarización está en la impunidad y en el sistema neoliberal”, aseguró.